2008-10-3-9

Trabajo Original

Valoración nutricional del anciano en la comunidad.

Nutritional assessment of elderly people in the community.

Dra. Tamara Álvarez Gómez1, Dra. Marisel de la C. Valdes Mijares2, Dra. Cristina Cabrera Cabrera3, Dr. Ricardo E. Amurrio Flores4, Edwin Giovany Ortiz Rojas5, Dr. José R. Valdés Utrera6

  1. Especialista de 1er grado en Gerontología y Geriatría. Master en Longevidad Satisfactoria. Profesora Asistente.
  2. Especialista de 1er grado en Gerontología y Geriatría. Master en Longevidad Satisfactoria .Profesor Instructor .
  3. Especialista de 2do grado en Histología. Master en Longevidad Satisfactoria. Profesora Auxiliar.
  4. Especialista de 1er grado en MGI. Residente de Cardiología. Master en Longevidad Satisfactoria.
  5. Estudiante de 3er Año de Medicina.
  6. Especialista de 1er grado en Fisiología. Profesor Asistente.

RESUMEN

El estado nutricional de los ancianos está determinado por los requerimientos y la ingesta; ellos a su vez son influenciados por otros factores, como la actividad física,   los    estilos   de vida, la existencia de redes sociales y familiares, la actividad   mental    y    psicológica, el   estado   de   salud   o   enfermedad   y restricciones   socioeconómicas. En la atención primaria  no se realiza una valoración del estado  nutricional de los adultos mayores  cuando estos asisten a consulta, aspecto importante a tenerse en  cuenta para poder identificar  estados de malnutrición o  pacientes  riesgos, por lo que el objetivo del trabajo es describir el estado nutricional  de los ancianos del consultorio # 5 del Policlínico Docente Celia Sánchez Manduley de la ciudad de Sancti Spíritus. Se realizó un estudio descriptivo trasversal en el período comprendido  entre el  1 de mayo del 2006 hasta el 31 de enero del 2007. La población de estudio estuvo conformada por 103 ancianos que cumplieron los criterios de inclusión. El mayor porciento resultó ser ancianos normopesos, donde predominó una población anciana joven (entre 60 y 69 años) con un ligero predominio del sexo femenino, con  estilos de vida no saludables que indican riesgo en su estado nutricional, lo cual guarda relación con la falta de conocimiento, por parte de ellos de los perjuicios que causan los mismos al estado de salud. La Hipertensión Arterial  resultó ser la enfermedad prevaleciente que estuvo en relación con la ingesta excesiva de sal, grasa animal y la no práctica de ejercicios físicos.

DeCS: ESTADO NUTRICIONAL / fisiologia SERVICIOS DE SALUD COMUNITARIA.

ABSTRACT

The nutritional status of  elderly people is determined by the requirements and food intake; they in turn are influenced by other factors, such as physical activity, lifestyles, existence of social and family networks, mental and psychological activity, status of  health or disease and socioeconomic restrictions. In primary care no assessment is made of the nutritional status of elderly people when they they attend to consultation, which is an important aspect to be taken into account to be able to identify malnutrition conditions or patient risks. Therefore, the objective of this work is to describe the nutritional status of the elderly people of family doctor’s clinic #5 of the Celia Sánchez Manduley Teaching Polyclinic of the city of Sancti Spíritus. A descriptive cross-sectional study was made in the period from May 1 of 2006 up to January 31 of 2007. The study population was made up of 103 elderly people who met the inclusion criteria. The greatest percent turned out to be people with a normal weight, and a younger population prevailed (between 60 and 69 years) with a light prevalence of the female sex, with non healthy lifestyles that indicate risk in their nutritional status and is related with the lack of knowledge, on the part of them of the damages that they cause to the health status. Hypertension turned out to be the prevalent disease that was  related with the excessive intake of salt, animal fat and the practice of physical exercises.

MeSH: NUTRITIONAL STATUS / physiology COMMUNITY HEALTH SERVICES.

INTRODUCCIÓN

El envejecimiento se asocia con un progresivo deterioro biológico y aumento de problemas de   salud, resultantes de la interacción de factores genéticos y ambientales (1,2). El estado nutricional de los ancianos está determinado por los requerimientos y la ingesta, ellos a su vez son influenciados por otros factores, como la actividad física,   los    estilos   de vida, la existencia de redes sociales y familiares, la actividad   mental    y    psicológica, el   estado   de   salud   o   enfermedad   y restricciones   socioeconómicas (3,4,5,6). Cualquier   evaluación del   estado nutricional, por   lo    tanto, debe   incluir   información   sobre estos factores, con el objeto de   entender    la    causa   de    posibles deficiencias, diseñar las actividades correctivas y evaluar su eficiencia (7, 8, 9). Para    la     valoración    del    estado    nutricional de los ancianos se desarrolló en Estados Unidos a comienzo de los 90, el Nutrition Screanig Initiative, el cual   permite detectar en pocos minutos   una serie de problemas nutricionales sociales o sanitarios que precisarán intención médica y/o nutricional. Determinación    del     índice    de    masa    corporal    y    la   realización de un pequeño   cuestionario   sobre    los     hábitos   alimentarios,   condiciones  de vida, situación económica, social  y    física      permite  detectar signos de alarma del estado nutricional (10, 11, 12, 13).

En la atención primaria  no se realiza una valoración del estado  nutricional de los ancianos cuando estos asisten a consulta, aspecto importante a tenerse en  cuenta para poder identificar  estados de malnutrición o la identificación precoz de riesgos nutricionales, por  lo que de objetivo del trabajo es describir el estado nutricional  de los ancianos del consultorio # 5 del Policlínico Docente Celia Sánchez Manduley de la ciudad de Sancti Spíritus.

MATERIAL Y MÉTODO

Se realizó un estudio descriptivo transversal  en el período comprendido del 1 mayo del 2006 al 31 enero del   2007.  Población – 103 ancianos que integraban dicho consultorio.

Criterios de inclusión – Se incluyeron los de 60 años y más que aceptaron colaborar con el trabajo Criterios de exclusión – Ancianos con demencia moderada o severa  que no colaboraran con el estudio. Las variables  operacionalizadas fueron edad,  sexo, convivencia, per cápita familiar, grado de dependencia, estilos de vida, enfermedades asociadas y   evaluación nutricional la que se calculó a través del Índice de Masa Corporal (IMC), considerándose:

a) Bajo peso se consideró cuando el IMC estaba entre 16 y  18.4%.

b) Normopeso se consideró cuando el IMC estaba entre 18.5 y 24.9%.

c) Sobre peso   se consideró cuando el IMC estaba entre 25 y 29.9 %   (14).       

La encuesta (Anexo 1) utilizada fue aplicada en otros estudios (14) realizados en esta área de salud. Para determinar la presencia de estados depresivos se aplicó la   Escala de Depresión Geriátrica    de Yesavage   (Anexo 2) y se consideró la presencia de esta alteración psicológica por encima de los 10 puntos.  El    Test     de K.   Hasegawa     (Anexo 3)    y    Minimental     State   Examination   se utilizó    para     diagnosticar     estados   demenciales. En el caso del Test de K. Hasegawa   se valoró   la presencia    de demencia por     debajo de 20 puntos.

RESULTADOS

La Tabla 1 representa la distribución del estado nutricional de la población estudiada según grupo de edades. Los ancianos normopeso constituyeron el 91.3 % del total, con similares cifras en los grupos de 60 a 64 años y de 65 a 69 con 31.1 % y 28.2 %, respectivamente, seguido del grupo etário de 70 a 74 años con 19.4 %. Los gerontes bajo peso fueron 5 que representó el 4.8 %, mientras que los sobrepeso fueron solamente 4 para un 3,9 %. De forma general los grupos etários que predominaron fueron los comprendidos entre 60-64 y 65 -69 respectivamente.

La relación del estado nutricional según el sexo (Tabla 2) muestra que hubo un ligero predominio de los femeninos (50.5 %) sobre los masculinos (49.5 %), ambos aumentaron a expensas de los normopeso con 90.4 % y 92.2 %, respectivamente.

La Tabla 3 muestra la distribución del estado nutricional de acuerdo con la convivencia de la población geriátrica estudiada. Predominaron los senescentes que convivían con otros familiares, representado un 76.6 % del total, seguido de los que vivían con otro anciano con un 14.6 %. Los ancianos solos, representaron el 8.7 %. Los adultos mayores normopeso mostraron similares por cientos en los que convivían con otro anciano (93.3 %) y los que eran cuidados por otros familiares (92.4 %). Los bajo peso fueron el 22.2 % en aquellos que vivían solos, mientras que los sobrepeso se agruparon en los que vivían con otras personas.

La relación entre el estado nutricional y la per cápita familiar (Tabla 4) refleja que la condición de regular predominó con un 73.8 %, seguida de la condición de buena con 17.5 %. La condición de mala solo fue el 8.7 %. Las tres condiciones tuvieron los mayores valores en los normopeso, siendo de 94.4 % en la buena, 90.8 % en la regular y 88.9 % en la mala.

La tabla # 5 expresa la relación de la dependencia de acuerdo con estado nutricional de la muestra estudiada. Los senescentes independientes fueron 93 que representó el 90.3 %, los dependientes solo fueron 10 para un 9.7 %. Aquellos que eran normopeso predominaron para ambas categorías; sin embargo los dependientes tuvieron predominio en los bajo peso con un 10.0 % y los independientes en el sobrepeso con un 4.3 %.

La distribución de los estilos de vida se muestra en  la tabla # 6. El exceso  en la ingestión de sal predominó  con 68 ancianos que hacían abuso de su consumo (66 %), la ingestión de grasa animal  y el hábito de fumar mostraron similares porcentajes con 62.2 % y 51.5.% respectivamente, todos con predominio en los gerontes normopeso.  La práctica del ejercicio físico se presentó en un 5,8 de la población .El consumo de alcohol solo representó el 3.9 % del total.

La tabla 7 muestra la relación de las enfermedades asociadas según el estado nutricional de los adultos mayores estudiados. La hipertensión arterial afectó al 48.6 % de la población. La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) la padecían 18 pacientes que representó el 17.5 %; mientras que la cardiopatía isquémica crónica y la diabetes mellitus afectaron al 12.6 % y 9.7 % respectivamente. La distribución de estas enfermedades predominó en los normopesos exhibiendo un 90 % para los hipertensos y diabéticos en este estado nutricional. Los bajo peso sufrieron más de enfermedad dispéptica (28.6 %), mientras que los sobrepesos fueron afectados más por la  hipercolesterolemia (12.5 %). Estudios realizados encontraron resultados similares, donde  la hipertensión arterial, la EPOC, la cardiopatía isquémica y la diabetes mellitus resultaron ser las enfermedades más frecuentes en los senescentes (16, 24, 25).

DISCUSIÓN

González y Martínez (15,16) reportan similares resultados en otros estudios realizados en Cuba, donde existe un predominio de los más envejecidos. A pesar de ser Sancti Spíritus la tercera provincia más envejecida del país, este CMF se encuentra ubicado en una zona de desarrollo del municipio, donde predomina la población anciana joven.

Estudios realizados en Cuba y otros países comentan  que la mujer, por problemas de tipo hormonal y exponerse a los trabajos menos forzosos, suele tener mayor esperanza de vida que el hombre (12, 17, 18), lo cual pudiera explicar los resultados obtenidos en este trabajo.

Frecuentemente en la tercera edad hay carencia de afectividad, de proyectos, de relaciones, lo que explica que la dieta de los ancianos es más completa cuando viven en familia o en instituciones que cuando viven solos (17,19). En los ancianos siempre que sea posible es importante evitar la soledad, comer en compañía y aumentar las relaciones sociales. Es importante fomentar en los gerontes los aspectos relacionados con el carácter convivencial y lúdico de las comidas, según comentan Arbonés y Carbajal en estudios realizados con los ancianos españoles (18).

Figueroa y García plantean que con frecuencia los ancianos tienen dificultades económicas que les impiden comprar la comida necesaria, cuando esto ocurre los primeros alimentos que se evitan son los más caros que suelen ser los que aportan la mayor cantidad de proteínas, como las carnes y los pescados (19,20).

Un buen estado nutricional del anciano influye en la funcionalidad del mismo, puede mejorar su independencia y viceversa, que realmente es lo que se considera, desde el punto de vista geriátrico como concepto de salud, pero el deterioro nutricional del anciano trae consigo el abandono de funciones y la postración (17, 20,21).

Ramos  en  un  estudio  realizado  reflejó resultados similares en cuanto al consumo de grasa animal (22). Recientes estudios demostraron que existe una relación entre el consumo excesivo de cloruro de sodio (sal de mesa) y daño cardíaco, renal y cerebral, independientemente del nivel de presión arterial. El sodio disminuye los niveles de óxido nítrico y, por ende, un consumo excesivo aumenta el riesgo de daño vascular, cerebral, cardíaco y renal -órgano blanco de la presión arterial alta (23). El hábito de fumar como estilo de vida no saludable ha mostrado porcentajes  elevados y   continúa siendo alta en los ancianos;  el efecto beneficioso de abandonar el tabaquismo ha sido demostrado. (24)

Estudios realizados encontraron resultados similares a los nuestros, donde  la hipertensión arterial, la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, la cardiopatía isquemia y la diabetes mellitus resultaron ser las enfermedades más frecuentes en los senescentes (16, 24, 25).

CONCLUSIONES

De la población estudiada el mayor por ciento resultó ser ancianos normopesos donde predominó una población anciana joven con un ligero predominio del sexo femenino, lo cual guarda relación con la ubicación en una zona de desarrollo del Consultorio y con la mayor expectativa de vida que presentan las féminas  en comparación con los del sexo masculino  que supera los 6 años. Los gerontes estudiados presentaron estilos de vida no saludables, que indican riesgo en su estado nutricional,  entre los que se destacan el consumo excesivo de sal y  grasa animal, el  tabaquismo y no práctica del ejercicio físico, siendo la hipertensión arterial  la enfermedad prevaleciente lo cual guarda relación con los hábitos tóxicos predominantes.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

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ANEXOS

Encuesta. Nombre y apellidos Sexo: M---- F----

- Edad : 60 a 64 años 65 a 69 años 70 a 74 años 75 a 79 años 80 y más
- Escolaridad
Iletrado Primaria sin terminar Primaria terminada
Secundaria Preuniversitario Universitario
- Estado civil: Casado --- Soltero -- - Divorciado -- - Acompañado - Viudo----
- Categoría ocupacional: Jubilado - Trab. -Agrícola - Trab. activo - Ama de casa-
- Convivencia
Vive solo Vive con otros ancianos Con otros familiares Con otras personas
e) En caso de vivir con otras personas ó familiares ¿Ellos trabajan? Sí -- No --
- Padece Usted de intolerancia a algún alimento Sí -- No --
- Bebe Usted: Nunca -- A veces-- Con frecuencia --
- Tiene Usted alguna dieta impuesta Sí -- No --
De ser afirmativo responda ¿Quién se la indicó?
Familia --- Médico --- Usted --- Otra persona---
-¿Toma algún medicamento? Sí -- No -- ¿Cuáles ?--
- ¿Cuántos viven en su casa? ¿Qué cantidad de dinero entra en su casa?
- ¿Qué entiende Usted por comer proteínas?
- Qué tipo de grasa ingiere en su alimentación?
¿Come Usted bajo de sal? Sí No
¿A qué hora come Usted normalmente?
- ¿Tiene Usted dificultad para preparar los alimentos?
Sí -- No -- ¿Cuáles?
¿Ha sido Usted hospitalizado? Sí -- No --
¿ En cuántas ocasiones ?. Mencione las causas.
¿Fuma? Sí No . ¿Qué tiempo lleva fumando? ¿Con qué intensidad?
Menos de 10 cigarrillos De 10 a 20 cigarrillos Más de 20 cigarrillos
-Nunca ha fumado Sí -- No-- - Exfumador Sí-- No --
- Tiempo que fumó
- ¿Realiza Usted ejercicios? Sí-- No --
- ¿Padece Usted de alguna enfermedad? Sí -- No -- ¿Cuál ó cuáles?
- ¿Tiene Usted trastornos gastrointestinales? Sí -- No --
- ¿Tiene buen gusto (sabor)? Sí -- No --
- ¿Tiene buen olfato (olor)? Sí -- No --
-¿Tiene buen apetito? Siempre -- A veces -- Nunca --
- ¿Se siente Usted deprimido?
a) A veces -- b) Siempre -- c) Casi siempre -- d) Nunca --

Tabla 1:.Estado nutricional ancianos según edad. Policlínico Docente Celia Sánchez Manduley. CMF 5. Mayo 2006 - Enero2007

Grupo de edades.

Estado Nutricional

Bajopeso

Normopeso

Sobrepeso

Total

Número

%

Número

%

Número

%

Número

%

60-64

1

3.1

30

93.8

1

3.1

32

31.1

65-69

0

0

28

96.5

1

3.5

29

28.2

70-74

1

5.0

19

95.0

0

0

20

19.4

75-79

2

20.0

6

60.0

2

20.0

10

9.7

80 y más

1

8.3

11

91.7

0

0

12

11.6

Total

5

4.8

94

91.3

4

3.9

103

100

Tabla 2: Estado nutricional según sexo .Policlínico Celia Sánchez CM # 5. Mayo 2006- Enero 2007.

Sexo

Estado Nutricional

Bajopeso

Normopeso

Sobrepeso

Total

Número

%

Número

%

Número

%

Número

%

Masculino

3

5.9

47

92.2

1

1.9

51

49.5

Femenino

2

3.8

47

90.4

3

5.8

52

50.5

Total

5

4.8

94

91.3

4

3.9

103

100

Tabla 3:.Estado nutricional según convivencia. Policlínico Celia Sánchez CMF 5. Mayo 2006- Enero 2007.

Convivencia

Estado Nutricional

Bajopeso

Normopeso

Sobrepeso

Total

Número

%

Número

%

Número

%

Número

%

Anciano solo

2

22.2

7

77.8

0

0

9

8.7

Anciano

1

6.7

14

93.3

0

0

15

14.6

Anciano con otros familiares

2

2.5

73

92.4

4

5.1

79

76.7

Total

5

4.8

94

91.3

4

3.9

103

100

Tabla 4: Estado nutricional según percápita .Policlínico Celia Sánchez CMF 5. Mayo 2006- Enero 2007.

Percápita Familiar

Estado Nutricional

Bajopeso

Normopeso

Sobrepeso

Total

Número

%

Número

%

Número

%

Número

%

Buena

0

0

17

94.4

1

5.5

18

17.5

Regular

5

5.3

69

90.8

3

3.9

76

73.8

Mala

1

11.1

8

88.9

0

0

9

8.7

Total

5

4.8

94

91.3

4

3.9

103

100

Tabla 5:.Estado nutricional Dependencia. Policlínico Celia Sánchez CMF 5. Mayo 2006- Enero 2007

Dependencia

Estado Nutricional

Bajopeso

Normopeso

Sobrepeso

Total

Número

%

Número

%

Número

%

Número

%

Independientes

4

4.3

85

91.4

4

4.3

93

90.3

Dependientes

1

10.0

9

90.0

0

0

10

9.7

Total

5

4.8

94

91.3

4

3.9

103

100

Tabla 6: Estado nutricional según estilos de vida .Policlínico Celia Sánchez CMF 5. Mayo 2006-Enero 007.

Estilos de vida

Estado Nutricional

Bajopeso

Normopeso

Sobrepeso

Total

Número

%

Número

%

Número

%

Número

%

Hábito de fumar

2

3.8

50

94.3

1

1.9

53

51.5

Ingestión de grasa animal

2

3.1

59

92.2

3

4.7

64

62.2

Ingestión excesiva de sal

4

5.9

60

88.2

4

5.0

68

66.0

Alcohol

2

50.0

2

50.0

0

0

4

3.9

Práctica de ejercicio físico

0

0

5

83.3

1

16.7

6

5.8

Tabla 7.Estado nutricional ancianos según Enfermedades crónicas no trasmisibles. Policlínico Docente Celia Sánchez Manduley. CMF 5. Mayo 2006- enero2007.

Enfermedades asociadas.

Estado Nutricional

Bajopeso

Normopeso

Sobrepeso

Total

Número

%

Número

%

Número

%

Número

%

Enfermedad dispéptica

2

28.6

5

71.4

0

0

7

6.8

Diabetes mellitus

1

10.0

9

90.0

0

0

10

9.7

Enfermedad pulmonar obstructiva crónica.

2

11.1

16

88.9

0

0

18

17.5

Hipertensión arterial.

1

2.0

45

90.0

4

8.0

50

48.6

Cardiopatía Isquémica coronaria

1

7.7

11

84.6

1

7.7

13

12.6

Hipercolesterolemia

0

0

7

87.5

1

12.5

8

7.8




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