Policlínico Provincial de Combatientes. Sancti Spíritus. Cuba.
Dra. Mylene del Carmen Rodríguez Betancourt1, Dra. Maritza Mursulí Sosa2, Dr. Raúl Díaz Batista3, Lic. Tairi C. Rodríguez Navia4
Fundamento: La terapia magnética es un método de tratamiento no invasivo con un nivel de éxito muy elevado. No han existido problemas con los efectos secundarios y las contraindicaciones son bien conocidas. Es una alternativa de tratamiento para el dolor miofacial. Presentación de casos: se presentan dos casos de pacientes tratados con magnetoterapia los cuales habían sido tratados con terapia convencional sin lograr mejoría alguna.
Palabras clave: Magnetoterapia, Dolor MiofacialBackground: Magnetic therapy is a non-invasive treatment method with a very high level of success. There have been no problems with side effects and contraindications are well known. It is an alternative treatment for myofascial pain. Case Presentation: A presentation is made of two cases of patients treated with magnetic therapy which had been treated with conventional therapy without achieving any improvement.
Los trastornos funcionales del aparato masticatorio incluyen cualquier alteración en las relaciones de los dientes con sus estructuras, tales como: los maxilares, la articulación temporomandibular (ATM), los músculos, así como la inervación y vascularización de los tejidos.
El síndrome de disfunción temporomandibular se caracteriza por evolucionar con variados síntomas, algunos considerados típicos como el dolor provocado por las alteraciones de la ATM o de la musculatura masticatoria, otros consistentes en espasmo muscular, incapacidad para abrir la boca, ruidos articulares (chasquido o crepitación) y desviación mandibular, entre otras1.
Okeson lo define como un extenso grupo de trastornos o enfermedades músculo esqueléticas derivadas de las estructuras masticatorias. Estas estructuras serán los maxilares, la articulación temporomandibular (ATM), los músculos y el paquete vasculonervioso.
Estas alteraciones de los músculos masticatorios pueden ir desde el grado I hasta el grado VI, encontrando la co-contracción muscular, el dolor muscular local, dolor miofacial, mioespasmos, miositis y fibromialgias. Básicamente existen cuatro tipos de tratamientos que, en función del diagnóstico, pueden aplicarse: tratamiento físico, tratamiento farmacológico tratamiento psicológico, aparatos intraorales, o placa de descarga2. Sin embargo la Sociedad de Disfunción Craneomandibular y Dolor Orofacial (SEDCYDO), incluye además de estos, otros tipos de tratamiento, los cuales están en dependencia de la actuación de los profesionales que forman el equipo multidisciplinario, responsables del tratamiento de la disfunción. Al ser múltiples causas dentro de la misma patología, ellos incluyen además, el tratamiento ortodóncico, (si es necesario corregir la mordida) Odontológico (para tratamiento dental como podría ser el tallado selectivo de las cúspides dentarias) la fisioterapia y la cirugía3.
Una alternativa para el tratamiento de esta patología es la magnetoterapia o terapia por imanes estudios recientes han demostrado, que esta técnica puede ser aplicada en estomatología en afecciones como hiperestesia, celulitis, regeneración ósea, gingivitis rebeldes, abscesos periodontales y en tratamiento de la ATM, en artritis, artrosis, trismo y síndrome dolor disfunción4.
El estudio de este síndrome ocupa un papel fundamental en el desarrollo de la odontología actual, ya que se considera que el 93% de la población general sufre algún tipo de desorden y que entre el 5 y el 13% sufre de alguna patología significativa. Aunque puede aparecer en cualquier edad, la mayoría de los pacientes se encuentran entre los 20 y 40 años de edad; existiendo una mayor prevalencia en mujeres, en proporción de 3 mujeres por cada hombre2. En Cuba estudios realizados en la provincia de Santiago de Cuba revelaron que el 56.6% presentaba disfunción moderada1 y en la provincia de Sancti Spíritus según informaciones estadísticas de los pacientes que acuden a la consulta de Prótesis del Policlínico de Combatientes la disfunción se presenta en el 53.2 % de los pacientes.
Los pacientes afectados acuden a consulta con aumento de estos síntomas que en algunos casos son tan agudizados que provocan en ellos trastornos psicosociales y un alto grado de irritabilidad ya que en la mayoría de los casos, los tratamientos recibidos en sus diferentes áreas de atención estuvieron encaminados solo al alivio temporal del dolor.
Algunos autores piensan que las interferencias oclusales son la causa principal del problema, en cambio, otros concluyen que la oclusión juega un papel menor, siendo el estrés la causa primaria. Es cierto que los disturbios emocionales juegan un rol importante en la etiología del síndrome, especialmente los del tipo social y domésticos, incrementan significativamente el tono muscular5.
Está demostrado que la magnetoterapia posee un efecto generalizado de relajación y sedación, muy útil para el tratamiento del estrés y de las afecciones de él derivadas. Este efecto se ha supuesto debido, por una parte, al aumento en la producción de endorfinas y, por otra, al hecho de su actuación de relajación muscular e hipotensora, puesto que siempre que se asocian estos dos efectos hay un marcado efecto relajante general sobre el organismo6.
Otros investigadores plantean que el mecanismo de analgesia está dado por el efecto bloqueador en los canales de potasio y la liberación de péptido opiáceo, lo cual incrementa la actividad analgésica; razón por la cual recomiendan este tratamiento en pacientes con afecciones que causen dolor7.
Por estos motivos es que se aplica esta alternativa de tratamiento en estos pacientes con evolución prolongada de dolor miofacial asociado a una gran sobrecarga emocional, brindando una alternativa de tratamiento para esta patología y a su vez para el estrés que están sometidos.
Caso # 1
Paciente de 44 años de edad, sexo femenino que hace aproximadamente año y medio presentaba dolor en la región periauricular, refiriendo que por cortos períodos tiene perdida de la audición, fue remitida al servicio de otorrinolaringología donde se les realiza diferentes estudios sin encontrar causa aparente para esta sintomatología, se le indica antiinflamatorios y relajante muscular (Ibuprofeno y Meprobamato de 400mg durante un mes) pero los síntomas persistieron.
Posteriormente fue valorada por el servicio de ortopedia pues ya el dolor remitía a la zona cervical se le indicó una tomografía axial computarizada (TAC) de columna cervical sin arrojar daño alguno en esa zona, es medicada nuevamente con antiinflamatorios, relajante muscular y analgésico (ibuprofeno meprobamato y dipirona) no resolviendo sus episodios de dolor, es valorada también durante este período por los servicios de psiquiatría por presentar una ansiedad elevada con afectación del sueño, se le indican antidepresivos.
Al no sentir mejoría acude al servicio de fisioterapia del policlínico de su área de atención para recibir algún tipo de masaje para su relajación y de ahí es remitida al servicio de estomatología, a la consulta de Prótesis.
Exámenes realizados en la consulta de estomatología:
Diagnóstico:
Dolor miofacial (mialgias por puntos gatillos)
Planificación del tratamiento:
Se colocan imanes permanentes cerámicos de la siguiente forma.
Tratamiento local. Se colocan dos imanes de 500 gauss con polos negativos hacia la piel (uno en ATM derecha y el otro en ATM izquierda) para abarcar toda el áreade los músculos masticatorios. (Fig 1)
Tratamiento a distancia:
Para disminuir nivel de ansiedad y mejorar considerablemente su estado psicológico se aplica imanes permanentes cerámicos de 1200gaus de la siguiente forma
Lado izquierdo polo norte sobre piel (Fig 2)
Región subclavia izquierda polo norte sobre piel (Fig 3)
Rotula izquierda polo sur sobre piel
Izquierda polo sur sobre piel (Fig 4)
Estas sesiones se realizaron en días alternos con un promedio de 20 sesiones durante 30 minutos y cada 4 sesiones la paciente era evaluada.
Resultados:
A los 15 días se logró reducir el nivel de ansiedad a moderado y en la escala de dolor el paciente había pasado de un 10 a 5.
Al final del tratamiento este paciente se encontraba en un nivel de ansiedad bajo y en la escala aplicada para medir el dolor arrojo 2
Caso # 2
Paciente del sexo masculino de 53 años que había acudido al servicio estomatológico hace más menos 6 meses por presentar dolor a nivel de los músculos masticatorios, refiriendo dificultades para la masticación sobre todo de alimentos fibrosos y duros, en ese momento se le indica analgésicos, relajante muscular y la restricción del uso de la mandíbula a los límites que no produzca dolor, refiere el paciente que apenas deja el tratamiento medicamentoso el dolor aparece con gran intensidad. Es remitido entonces a la consulta de prótesis de su área de salud
Exámenes realizados en la consulta:
Se realiza interrogatorio y examen físico intra y extrabucal.. Se aplica el Test y entrevista psicológica (IDARE), Test y entrevista estomatologica (Helkimo).
Diagnóstico:
Dolor muscular local (mialgia no inflamatoria) Dolor miógeno, primario no inflamatorio que corresponde a una alteración del entorno local de los tejidos musculares.
Tratamiento
Colocación de imanes cargados a 1200 gauss con polo norte situados en la región dolorosa del paciente con fines terapéuticos durante 30 minutos y en días alternos de 10 sesiones
Evaluación
Se realizó una evaluación del caso cada 2 sesiones.
Resultados:
A los 10 días de tratamiento el paciente eliminó la mialgia y disminuyó considerablemente el nivel de estrés que presentaba a inicio del tratamiento, factor importante a tener en cuenta en los trastornos temporomandibulares.
El paciente se ha seguido su evolución por la consulta y hasta este momento (6 meses después) no ha presentado síntomas de recaída
En los pacientes tratados con magnetoterapia se logró que disminuyeran los signos y síntomas del dolor miofacial, así como los valores de los test de Helkimo e IDARE. Independientemente del tratamiento de magnetoterapia a los pacientes se les brindaron los medios y herramientas necesarias para su autocuidado así como la información necesaria de los factores de riesgo que pueden desencadenar las disarmonías oclusales.